Creo que la justificación del arte es la combustión interna que incendia el corazón de los hombres y no la exteriorización de sus superficiales manifestaciones públicas.
El propósito del arte no es una momentánea secreción de adrenalina sino, más bien, la construcción gradual a lo largo de toda una vida de un estado de asombro, maravilla y serenidad.
Glenn Gould